La hegemonía de Macedonia

    Queridos amigos amantes del saber, hoy toca recorrer como Macedonia se ganó su lugar en la historia. Un pueblo considerado bárbaro por los griegos llevó a la cultura helena más allá de su extensión, de la mano de sus líderes. 

Filipo II, el helenista

Retrato de Filipo II [1]

    La historia de Macedonia fue muy diferente a la del resto de Grecia. En primer lugar, Macedonia se ubicaba al norte de la región de Tesalia, en el límite con Tracia. Los macedonios no se consideraban griegos y eran vistos por estos como unos bárbaros, no compartían lengua ni costumbres. Durante el gobierno de Alejandro I (498-454 a.C.), se establecieron relaciones comerciales con Atenas y la cultura helena ingresó en el reino del norte. El sucesor de Alejandro I, Pérdicas II (454-413 a.C.) perdió el favor de Atenas por apoyar a Esparta durante la Guerra del Peloponeso. Arquelao I, el sucesor de Pérdicas, estableció una nueva capital, Pella, con gran influencia del arte heleno. Durante esos años, Macedonia padecía de los diferentes enfrentamientos en la región y estuvo al borde del colapso hasta la llegada de Filipo II al trono.

    Este gobernante logró la hegemonía en el norte, controlando el sur Tracia, Calcídica, y Tesalia luego de verse envuelto en la Tercera Guerra Sagrada, logrando la victoria en la Batalla del Campo de Azafrán en el 352 a.C. Luego fue nombrado arconte por los tesalios y logró presidir los Juegos Píticos, algo impensado que un extranjero participase de esta tradición pan-helenísitca. Atenas fue la polis más afectada por el avance macedonio y con la Paz de Filóctenes quedarían subyugados. Los atenienses presentaron una fuerte oposición contra Filipo, de la mano de Demóstenes.

Demóstenes, orador ateniense [1]

    En el 339 a.C, la Anfictonía de Delfos declararía la Cuarta Guerra Sagrada a Anfisa por cultivar en suelo sagrado. Filipo puso sus tropas en fócida para establecer su hegemonía en la zona, pero Demóstenes convocó una alianza a toda Grecia para hacer frente al invasor. Sin embargo, solo Tebas y algunos pueblos beocios se unieron a Atenas y fueron derrotados de manera humillante en la Batalla de Queronea (338 a.C).

    Para dejar en claro su dominio, Filipo convocó a las polis griegas en Corinto para funda una nueva liga Pan-helénica, conocida también como Liga de Corinto. La gran ausente fue Esparta quien había perdido su hegemonía tras las revueltas y desastres naturales en la región de Lacedemonia. La Liga de Corinto tenía dos objetivos, la paz definitiva entre las polis griegas y la venganza contra los persas. Durante ese tiempo, Persia estaba atravesando dificultades tras la muerte de Artajerjes III y la crisis sucesoria duraría un par de años hasta que Darío III fuese nombrado rey. A pesar de que Filipo ya había enviado tropas de expedición para tomar ciudades persas, terminó siendo asesinado en Egas, el 336 a.c por un miembro de su guardia personal llamado Pausanias durante la boda de su hija, Cleopatra de Macedonia. Como el hijo mayor de Filipo era discapacitado, se decidió nombrar como sucesor a Alejandro III, hijo de la princesa Olimpia de Epiro con el difunto Filipo.

    Entre los avances en el ámbito militar introducidos por Filipo están la catapulta de torsión y la falange macedónica, mucho más efectiva que las falanges hoplitas. Generalmente, suele ser opacada la figura de Filipo bajo la sombra de su hijo Alejandro, sin embargo, es considerado el iniciador de la unificación panhelena gracias a su capacidad diplomática y militar, siendo superior a las polis griegas que tanto habían disputado el control de la zona.

Falange macedónica [2]

Alejandro Magno, el conquistador

Escultura de Alejandro III [1]

    Alejandro Magno, conocido como Alejandro el grande, nació el 356 a. C, era hijo de Filipo II rey de Macedonia y de Olimpia de Epiro. El reinado de Alejandro Magno, al igual que su padre, comenzó con una crisis sucesoria, luego de que Filipo II fue asesinado en Egas, el 336 a. C por un miembro de su guardia personal llamado Pausanias.

    El apoyo de los generales veteranos de Filipo fue indispensable para su sucesión, quienes aconsejaban al monarca que actuara con cautela, consolidando su base de poder en Macedonia y utilizando la diplomacia para ganarse la benevolencia de los súbditos y aliados en el norte con el riesgo aun de perder influencia en Grecia, pero todo ello no era del agrado de Alejandro.

El recorrido de sus conquistas

El poder macedónico en Grecia

    Su primera gran campaña fue en el norte, a las orillas del Danubio contra el territorio de los Getas, que, al ser una incursión violenta, logró el sometimiento del resto de tribus tracias. Esta campaña concluyo con un tratado de amistad con un grupo de galos.

    

    Mientras él se encontraba en el norte, en Grecia crecía el rumor de su muerte, por lo que los tebanos se sublevaron sitiando la guarnición macedónica en Cadmea, confiados en recibir ayuda de Atenas y otros estados. Ello hizo que Alejandro marchara hacia las murallas de Tebas. Estos se negaron a rendirse como Alejandro les exigía por lo que arraso con la ciudad y sus habitantes fueron vendidos como esclavos. Cuando se difundió la noticia de la destrucción de Tebas, la Resistencia activa a la dominación macedónica cesó en toda Grecia.

Alejandro contra el imperio Persa

    Durante el 334 a. C, los persas se enfrentaron a Alejandro en la batalla de Gránico junto al rio del mismo nombre, donde la caballería persa perdió la vida y la infantería persa, que no había participado en el combate, huyó y abandonó a los mercenarios griegos que formaban el núcleo central de su ejército. 

    Al siguiente año, tuvo lugar la batalla de Issos. Alejandro dirigió sus tropas hacia las regiones costeras de Siria, Palestina y en último término Egipto. Si bien la embestida persa causó daños bastantes graves a la izquierda de los macedonios, el ataque directo de Alejandro y su caballería contra el centro de las líneas de Darío obligó a este a abandonar a sus hombres y emprender la huida. Entre el 332-331 a. C., Alejandro retomo su marcha hacia el sur bordeando la costa de Siria, donde la mayoría de las ciudades sirias y fenicias se rindieron, solo Tiro y Gaza presentaron resistencia, pero la ciudad cayo en agosto de 332.

    Una vez que el monarca macedonio abandonó Egipto decidido a buscar un enfrentamiento definitivo con Darío III con el cual se enfrentaron en Gaugamela. El ataque lanzado por Alejandro y la caballería de los Compañeros del rey contra el centro de las líneas enemigas obligó a Darío a abandonar sus tropas y escapar del campo de batalla. Las tres capitales más occidentales del imperio persa (Babilonia, Susa y Persépolis) cayeron en manos de Alejandro quien intentó ganarse la simpatía de la población local y sobre todo la del influyente clero babilónico.

Plano estratégico de la Batalla de Gaugamela [4]

La campaña en la India

    Durante 327 a. C., Alejandro y sus tropas entraron en la India, lo que consideraron como un mundo nuevo.  El ejercito de Alejandro magno y el de Poro rey de las tierras del rio Jhelum y Chenab, se enfrentaron en la batalla de Hidaspes, obteniendo la aniquilación total de las tropas enemigas. Sin embargo, asombrado por la nobleza de Poro, Alejandro lo restauro en el trono e incluso le concedió nuevos territorios.

    Alejandro abandonó la India con destino a Persia a finales de agosto de 325 a.C. Su propósito era establecer depósitos de víveres y reparar sus flotas que debía seguir la clásica ruta por la ribera norte del océano índico desde la desembocadura del Indo hasta el golfo Pérsico. El regreso de Alejandro desde la India desencadenó una serie de sublevaciones en todo su vasto imperio. Finalmente, Alejandro Magno murió en el 323 a.C. por una enfermedad, probablemente malaria, en la ciudad de Babilonia.

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El imperio luego de su muerte

Extensión del Imperio de Alejandro Magno tras su muerte [3]

    Con la muerte de Alejandro en 323 a.C, por la supervivencia del imperio que se extendía desde Macedonia hasta la India, se debía elegir rápidamente un monarca. Aún no había nacido el hijo que tendría con Roxana y el único familiar que quedaba era su hermanastro Arrideo con deficiencia mental por lo que una regencia era la solución más eficaz. Para evitar la guerra entre la infantería y la caballería macedónica, se decidió que el hijo de Roxana si nacía varón y Arrideo, gobernarían conjuntamente, fue así que cuando el niño nació fueron proclamados reyes bajo los nombres de Alejandro IV y Filipo III. 

    Sin embargo, esta solución no fue duradera, ya que la lucha por el imperio de Alejandro, duro casi medio siglo. Los repetidos intentos de los sucesores de Alejandro de mantener unido el imperio fracaso, y creció la visión de un nuevo sistema político que sería dominado por tres reinos gobernados por sendas dinásticas macedónicas: la de los Ptolomeos, cuyo reino comprendía Egipto, Palestina, Libia y Chipre; la de los Seléucidas cuyo territorio abarcaba la mayor parte del oriente próximo y medio; y la de los Antogónidas, que reinaban en Macedonia y en el norte de Grecia. Aquí se formaría el marco de la vida política y social de Egipto y el Asia accidental durante dos siglos, facilitando además el desarrollo de la cultura dinámica con bases en buena parte de la vida cultural de la antigüedad y la edad media.  

    Para más información, les compartimos este video de Andoni Garrido y su asombro canal "Pero eso es otra historia"😁😁:

Algunas curiosidades…

➤Filipo II quedó ciego de un ojo tras un enfrentamiento en el campo de batalla, característica con la suele ser retratado.

➤Alejandro Magno llegó a fundar unas cincuenta ciudades con el nombre de Alejandría. La más importante se encontraba en Egipto, hasta su ocupación y futura destrucción a manos del Imperio Romano tras la instauración de la cristiandad católica como religión oficial.

➤Su caballo Bucéfalo lo acompañó en batalla hasta que murió en el 326 a.C., en la batalla de Hidaspes. En su honor, Alejandro fundó una ciudad en su honor: Alejandría Bucéfala, conocida como Bucefalía.

➤Cuando Alejandro decidió sitiar la isla de Tiro, tuvo que construir un puente de tierra que demoró ocho meses, convirtiéndola en una península.

➤Alejandro Magno solicitaba a sus tropas casarse y tener descendencia con las mujeres extranjeras para establecer un linaje pan-helénico.

➤En la ciudad de Gordion, Alejandro se enteró de la leyenda del Rey de Tracia, Gordias, quien fue coronado al llegar a la región en su carro tirado por bueyes. Este rey ató su carro a un templo de Zeus con un nudo sumamente complicado de desatar. Gordias proclamó que aquel que pudiese desatar ese nudo conquistaría Asia. Alejandro, al ver el nudo, tomó su espada y lo partió.

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Fuentes:

Fernández Nieto, F. (coord.) (2005) Historia de Grecia y Roma. Tirant Lo Blanch. Valencia, España.

Pomeroy, S. Et. Al. (1998) La Antigua Grecia – Historia política, social y cultural. Ed. Crítica. Barcelona, España.

Notas:

[1] Imágenes extraídas de Microsoft ® Encarta ® 2009. © 1993-2008 Microsoft Corporation. Reservados todos los derechos.

[2] Enlace

[3] CC BY-SA 3.0, Enlace

[4] Enlace

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